Después de 74 años en la bolsa de Tokio, Toshiba, el gigante japonés que alguna vez representó el ingenio tecnológico y empresarial de Japón, ha dejado de cotizar. Este cambio marca el fin de una era para una empresa que ha enfrentado desafíos significativos en los últimos años, desde un escándalo financiero hasta la reorganización de sus divisiones y la venta de negocios clave.
El Escándalo Financiero y sus Consecuencias
En 2015, Toshiba se vio envuelta en un escándalo financiero que resultó ser "el evento más dañino para nuestra marca en 140 años de historia", según el entonces CEO Hisao Tanaka. El maquillaje contable, que infló las ganancias operativas durante años, marcó el comienzo de una serie de crisis para la empresa. Tanaka renunció, y la reputación de Toshiba sufrió un golpe significativo.
Crisis Continua y Reorganización
En los años siguientes, Toshiba continuó enfrentando desafíos. La declaración de bancarrota de Westinghouse, una compañía de energía nuclear adquirida por Toshiba en 2006, resultó en una pérdida multimillonaria. La venta de divisiones, como la de sensores de imagen a Sony y la de ordenadores personales a Sharp, se convirtieron en parte de la estrategia de reorganización de la empresa.
Cambios y Ofertas de Compra
A pesar de los esfuerzos de reestructuración, nuevas irregularidades en documentos contables se descubrieron en 2020. Se especuló sobre la posible separación de Toshiba en tres empresas diferentes, pero los accionistas no respaldaron este plan. En 2022, la compañía aceptó una oferta pública de adquisición de 14.500 millones de dólares por parte de Japan Industrial Partners (JIP).
Un Futuro con Nuevos Dueños
Con la aceptación de la oferta, Toshiba deja de cotizar en la bolsa de Tokio y pasa a ser propiedad de Japan Industrial Partners. Esto plantea incertidumbres sobre la estrategia a largo plazo de la empresa. El actual CEO, Taro Shimada, se espera que se centre en servicios digitales de alto margen, pero los detalles específicos del futuro de Toshiba aún no están claros.
A pesar de los desafíos y escándalos, Toshiba sigue siendo una empresa significativa en Japón, empleando a alrededor de 100,000 personas y manteniendo presencia en sectores clave como la energía, la electrónica y los semiconductores. El tiempo dirá cómo evoluciona esta icónica empresa en manos de nuevos propietarios.